Yuri Temirkanov y Denis Matsuev interpretan Prokofiev

De los cinco conciertos para piano escritos por Sergei Prokófiev, el que más atención ha recibido por parte del público ha sido el tercero, en Do mayor, Op. 26. El primer borrador de este concierto consiste en unas variaciones que Prokófiev escribió en 1913, pero luego dejó de lado el trabajo, que recién retomó en 1921. El tiempo de maduración rindió sus frutos: el trabajo terminado quedó dotado de una vitalidad notable, que pone en evidencia la destreza del compositor.

Con un balance permanente y exquisito entre el solista y la orquesta, la presente versión ofrece la legitimidad que solamente puede darle a esta obra un ensamble de músicos completamente ruso: a la Orquesta Filarmónica de San Petersburgo, dirigida por Yuri Temirkanov, se suma en el rol solista el hábil pianista Denis Matsuev. Completando el programa, la orquesta aborda una cuidada selección de números de las Suites 1 y 2 que Prokofiev elaboró a partir de la música de su ballet Romeo y Julieta, basado en la obra de William Shakespeare, un trabajo que en su momento alcanzó a tener mejor aceptación que el propio ballet. Y como cierre otra perla de la obra concebida para la danza por el compositor: el Amoroso de la música del ballet Cinderella, otra de sus piezas más celebradas.

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