W.A. Mozart: Misa de Coronación
Beethoven: El Rey Esteban

Para este concierto, registrado en la Cité de la Musique de París, la directora Laurence Equilbey elaboró un programa infrecuente, que combina tres importantes obras del repertorio, al mismo tiempo que propone lo que seguramente será para muchos un descubrimiento. En primer lugar, la famosa Misa de Coronación de Wolfgang Amadeus Mozart, que se escuchó por primera vez en la ceremonia de entronación del emperador Leopoldo, aunque en realidad había sido compuesta doce años antes. La interpretación revela la naturaleza grandiosa y extrovertida de la obra, sin obstar a pasajes más cálidos e íntimos, reservados a los solistas.

Las dos obras restantes son sin duda menos frecuentadas, a pesar de pertenecer ambas a dos de los principales compositores del siglo XIX: Ludwig van Beethoven y Carl Maria von Weber. De Beethoven se incluye una obra compuesta en 1811, para la apertura de un nuevo y lujoso teatro en Pest. La música acompañaría tres obras sobre temas húngaros escritas por August von Kotzebue, una de las cuales es la historia de El rey Esteban (otra fue Las ruinas de Atenas), héroe nacional de Hungría del siglo XI.

Finalmente, de Carl Maria von Weber, Kampf und sieg (Batalla y victoria), una cantata sobre textos de Johann Gottfried Wohlbrück, escrita en 1815 para cuatro voces solistas, coro y orquesta. La obra fue compuesta poco después de la derrota de Napoleón en Waterloo, donde las tropas francesas se enfrentaron a los prusianos e ingleses. El trabajo refleja un exaltado sentimiento nacionalista, y tiene la particularidad de resaltar la parte vocal por encima de los timbres instrumentales. A pesar de su naturaleza triunfante, este trabajo de Weber tiene también una perspectiva humanista que contrarresta la violencia de la guerra, y culmina con un llamado a la paz universal.

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